EL CHÍVIRI

Fiesta del Chíviri

Es una festividad que se realiza en la localidad de Trujillo, en Cáceres. Se celebra desde principios del S.XIX el Domingo de Resurrección, como culminación de la semana santa, Trujillo ha sido, y es lugar de encuentro para todos los vecinos de la comarca y visitantes, que desde la mañana y en la Plaza Mayor, concurrían para hacer sus apaños con el ganado. Con el paso del tiempo estos encuentros han evolucionado hacia algo más festivo, la gente se engalana con el traje típico, sobresaliendo los aderezos de las mujeres, resaltando su belleza y con pañuelos rojos atados al cuello bailan al son de canciones populares durante todo el día.

Algunas Canciones Populares

- Trujillo por las Pascuas yo no sé lo que parece
Ay, chiviri, chiviri, chiviri, ay, chiviri, chiviri, chon
Que vienen los forasteros y se encocan como peces
Ay, chiviri, chiviri, chiviri, ay, chiviri, chiviri, chon

Los bailes y canciones típicas son acompañados por embutidos,

tortillas, o queso, entre otros, compartidos entre ellos fraternalmente.

Después la población se marcha al campo a disfrutar de la comida y bebida típica de la fiesta como el frite de cordero.

Por la noche vuelven a reunirse para disfrutar de los conciertos que se celebran en la plaza mayor.

Hasta el día siguiente, lunes de Pascua, que celebran la romería y regresan al campo para continuar con la diversión.

MINA DE SAN BENITO Y HERRERIA

Este maravilloso recorrido comienza por el camino de los Turrunteros, un camino de tierra por el que se transita cómodamente y donde iremos rodeados de una fantástica vegetación que la caracteriza.

Comenzamos esta aventura por el camino de la Herrería y el Rostro y ya al comienzo vemos árboles como el quejigo con sus flores en forma de candelilla y como es característico nos encontraremos por todo el recorrido los famosos olivares que al bajar dejamos a la derecha. Encontramos algún frutal como pueden ser perales, melocotoneros … Y cuando llegamos abajo tenemos que pasar el primer arroyo, el del castañar y ahí cambia el paisaje, más húmedo debido al arroyo y donde encontramos chopos blancos, chumberas y como a orillas de cualquier río o arroyo encontramos plantaciones hortícolas de los lugareños donde vemos también una gran higuera en el camino que en época de verano da buen sombraje al camino y por ello es un buen sitio para el descanso del caminante.

Seguimos avanzando, ahora por camino de hormigón y a la izquierda dejamos una floraciones rocosas, todo este tramo no dejando de ver el pueblo siempre a nuestra derecha con un ángulo de foto típica de postal.

Tras esto entramos en zona un poco más monótona donde seguimos viendo olivares y también robles (en esta época jóvenes) y torvisco blanco.

Poco a poco llegamos a una zona donde se ha perdido un poco el camino y tenemos que andar rodeados de arbustos(jara, retama…) pero en breve llegamos otra vez al camino. La lavanda, junto con otras flores las encontramos en esta época adornando estas hermosas sendas y caminos y dando un punto de color especial.

Pronto llegamos al olivar donde se encuentra el llamado Pozo de San Benito al que da nombre el patrón de Castañar y se trata de una oquedad profunda (no se sabe exactamente la longitud) que servía, posiblemente, de respirad ero a la mina situada unos metros por debajo y por la que se accede por una entrada, hoy día medio tapada, pero igualmente accesible. Ya dentro de ella se puede caminar erguido lo que facilita la visita, pues tendrá algo menos de 2m de alto y el ancho también resulta cómodo. De ella se obtenían supuestamente diversos materiales como hierro, cuarcita o cobre. Tras sacar los materiales los trasladaban a la Herrería, que también visitaremos y que se trata de un edificio cercano junto al río donde trabajarían estos materiales que constaba de un acueducto por donde llevaban el agua por la superficie de éste y caía por unos huecos que tenía el techo y así movía un molino que trituraría la piedra para trabajarla después.

Observamos dentro de la Herrería y en las proximidades la escoria de estos materiales ya trabajados. Esta construcción está hecha de cal y mortero bastardo, se ve que ha aguantado muy bien las adversidades por sus materiales y sus anchos muros. Al estar cercano al río se puede dar un gustoso paseo por su orilla y disfrutar de su frescura, tranquilidad así como su majestuosa vegetación y fauna.

El viaje de vuelta se hace más tranquilo puesto que regresamos por el camino de la Cortija que se encuentra en muy buen estado y después únicamente nos desviamos para no acceder a la carretera e iremos por el camino de las Juntas, donde se encuentra una fuente que lleva el mismo nombre y que procede de la cercanía del lugar donde se juntan los ríos Ibor con el Viejas. Este camino nos llevará directamente al pueblo.

La duración de este recorrido será de, aproximadamente 5h y media y tiene una distancia de 7km y medio.

Pozo Y MINA de San Benito Y HERRERIA

RUTA EL CERRO DEL CASTILLEJO

RUTA EL CERRO DEL CASTILLEJO

Este cerro tiene un gran esplendor por ser un lugar virgen en cuanto a senderos, ya que se asciende a través de cas queras y entre matorral. En su cima se descubre parte de la muralla que rodeaba el castillejo que da nombre a este cerro y también alguna sorpresa curiosa como huecos, alguna pequeña cueva…

Salimos del pueblo por la parte de atrás, por la Ontanilla y ascendemos por el camino que une el pueblo con el llamado”campo de fútbol”, una planicie a medio camino entre el pueblo y nuestro destino. Por el camino encontramos frutales, olivos, encinas o arbustos como la retama o la jara. Continuamos hasta un pequeño collado y ahí va cambiando poco a poco el paisaje, pues encontramos pinos y castaños. Nos adentramos entre los pinos y a través del matorral y alguna pequeña casquera subiremos a la cima a la cual según nos vamos acercando podemos comprobar las maravillosas vistas, por un lado tenemos el pueblo(Castañar de Ibor) casi en su totalidad acompañado por algunos montes como el Camorro y a la espalda podemos divisar tras otro grupo de montañas la Sierra de Gredos, en esta época cubierto aun de nieve

Si seguimos nuestro recorrido nos encontraremos cada vez con mayor número de piedras que tendremos que pasar por encima pero si nos paramos a observar y bajamos de estas, comprobamos que el sitio por el cual andamos es la antigua muralla que rodeaba el castillo o castillejo y si observamos desde abajo la muralla se ven las piedras colocadas estratégicamente. Al llegar a la cima se observa perfectamente la belleza de los alrededores con unas vistas espectaculares a sus poco mas de 800 m donde se alcanza a ver por ejemplo la base de las Villuercas o la Sierra de Gredos casi en su totalidad. La bajada es parecida a la subida, seguimos por casqueras y entre matorral pero esta vez por la otra ladera,hasta llegar al camino que nos llevará hacia El Rincón que, tras cruzar el arroyo que lleva su nombre y caminar un poco entramos en otra parte denominada El Oreganal que nos lleva hacia el Camping Los Ibores donde comienza un camino asfaltado que nos lleva fácilmente hacia el pueblo y en el que se encuentra el centro de Interpretación de las Cuevas de Castañar de Ibor, ya que el acceso a estas está cerca de esto.

La duración es de unas 4 h y media y tiene un recorrido de unos 5´5 km. Se aconseja que no se haga en tiempo de lluvia pues las piedras resbalan y podríamos tener un susto.

EL CAMORRO DE CASTAÑAR

EL CAMORRO DE CASTAÑAR

Esta vez nos aventuramos a conocer el Camorro de Castañar de Ibor, con sus 1150m, que subiremos con no mucha dificultad aunque con un poco de pendiente puesto que estamos a unos 700 en el pueblo, mas concretamente en la plaza, de la que comenzamos la mayoría de las rutas y esta no iba a ser menos. Descubrimos multitud de fósiles entre otras cosas y para finalizar, la bajada la hicimos algo mas complicada, pero al final conseguimos nuestro objetivo con un poco de agobio y cansancio ya en el cuerpo.

Como he dicho anteriormente partimos de la plaza del pueblo sobre las 9 de la mañana como acostumbramos a hacer y nos dirigimos por los Castañares hasta El Postuero, recorrido que ya hemos hecho para subir a Los Castaños Centenarios y Calabazas, pero no bajamos, sino que nos adentramos por un camino a la derecha que nos subirá directamente hacia nuestro destino.

Este camino no es muy tosco puesto que vamos entre robledales y estos nos dan sombra, también a la derecha se adivina un arroyo o riachuelo ahora seco donde encontramos pequeñas presas de agua de las cuales desconocemos su uso pero esperamos averiguar en breve.

Seguimos caminando y en breve, tras una pendiente un poco mas pronunciada, alcanzamos un punto de descanso en el que aliviamos un poco las piernas y la sed que ya empieza a hacer mella y donde empezamos a encontrar los primeros fósiles que veremos ya en todas y cada una de las piedras con las que nos vamos topando, sorprendiéndonos cada cual un poco más que la anterior. Avanzamos en nuestro camino y, aunque parándonos a ver una multitud de fósiles y la insólita arena que simula la del desierto o la playa, llegamos a un punto donde paramos a comer mientras admiramos las vistas que ya hemos empezado a percibir.

Después de recargar energías continuamos y en breve alcanzamos los 1150m tan esperados de nuestro destino :el punto más alto del Camorro. La bajada, como he citado antes, se nos hizo mas dura por sus abruptas casqueras y su poblado bosque, pues no seguimos una senda marcada sino que nosotros mismos fuimos abriendo camino entre la maleza para alcanzar el camino que parecía que se nos iba alejando cada vez más puesto que no sabíamos exactamente por donde íbamos y las fuerzas ya iban decayendo.

Pero, aunque duro, fue una aventura inolvidable que nos hizo pensar la capacidad que tenemos y la fuerza que debemos sacar muchas veces para alcanzar nuestro fin. La distancia es de km y la duración fue de unas 6h y media aproximadamente debido al camino de bajada bastante complicadillo que hicimos.